La Conferencia sobre Reducción de las Amenazas Biológicas de la OMSA aborda los altos riesgos para la seguridad sanitaria mundial
27 de octubre de 2025, París – En un mundo cada vez más frágil y propenso a los conflictos, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) celebrará un encuentro global de gran relevancia destinado a promover un diálogo inclusivo y la creación de alianzas transformadoras para un futuro más seguro y saludable.
La Conferencia Mundial sobre la Reducción de las Amenazas Biológicas tendrá lugar del 28 al 30 de octubre de 2025 en Ginebra (Suiza). Reuniendo a expertos de diversos ámbitos, el evento ofrecerá una plataforma para debatir sobre los riesgos crecientes en materia de seguridad y las estrategias necesarias para cerrar la brecha existente en la reducción de las amenazas biológicas.
Los patógenos animales siguen causando estragos en todo el mundo, y los riesgos asociados a su uso indebido continúan siendo reales y en evolución. Las cifras son reveladoras: más del 75% de las enfermedades emergentes y el 80% de los agentes con potencial bioterrorista son de origen zoonótico. La sanidad animal se erige así como un pilar esencial de la seguridad sanitaria mundial. Otros datos muestran que los animales de producción representan el 40% del valor agrícola mundial, y que una de cada cinco personas depende directamente de ellos para su sustento.
En un mundo cada vez más interconectado y complejo, la seguridad sanitaria mundial también es una cuestión de seguridad nacional, lo que convierte a los veterinarios en la primera línea de defensa. Sin embargo, la protección frente a las amenazas biológicas requiere una acción unida que abarque los sectores de la seguridad, la salud humana, animal y ambiental.
Dra. Emmanuelle Soubeyran, Directora General de la OMSA.
La interconexión entre la salud animal, humana y ambiental, así como con la seguridad, pone de relieve la necesidad urgente de prepararse ante escenarios imprevisibles que podrían transformarse rápidamente en desastres. En 2019, el Índice Mundial de Seguridad Sanitaria advirtió que la mayoría de los países no estaban preparados para afrontar un brote grave. Menos de un año después, la pandemia de COVID-19 sorprendió al mundo, evidenciando la debilidad de los sistemas de salud pública ante una crisis sin precedentes. Aunque no fue intencional, la pandemia de COVID-19 sirve como un recordatorio contundente del enorme impacto que un agente biológico (si fuera utilizado como arma) podría tener sobre las economías y las sociedades a nivel global.
Hoy en día, el rápido avance de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y la biología sintética añade una nueva urgencia a la acción. La regulación no avanza al mismo ritmo que la innovación tecnológica. Con barreras de acceso y desarrollo cada vez más permeables, se ha vuelto más factible que personas con intenciones maliciosas puedan crear y emplear armas biológicas. Los animales, en particular, podrían convertirse en objetivos de ataques diseñados para desestabilizar los sistemas alimentarios y las economías.
“Durante tres días, la conferencia abordará temas transversales de gran relevancia en la agenda política mundial. Desde el cambio climático hasta la desinformación, desde la ciberseguridad hasta la sostenibilidad de los laboratorios, casi ningún tema quedará fuera. Celebrado en el Centro Internacional de Conferencias de Ginebra (CICG), cerca del Palacio de las Naciones, el evento fomentará el diálogo sobre el papel que pueden desempeñar los distintos sectores, trabajando de forma conjunta, para prevenir y responder a las amenazas biológicas.”
La OMSA ocupa una posición de liderazgo en la reducción de las amenazas biológicas. Sus iniciativas emblemáticas, como “Reforzar la resiliencia frente a la agrocriminalidad y el agroterrorismo”, en asociación con la FAO e INTERPOL, y “Fortalecer la resiliencia institucional frente a las amenazas biológicas”, financiada por el Gobierno de Canadá, han contribuido a reforzar la preparación nacional y las capacidades institucionales ante un futuro incierto. La OMSA también colabora estrechamente con la OMS en la gestión de riesgos biológicos en laboratorios, en la sostenibilidad de los laboratorios (BioPrevail) y en la investigación de doble uso y la promoción de la conducta responsable en la ciencia.
“La erradicación de la peste bovina, una enfermedad animal mortal, primer gran logro en el ámbito de la sanidad animal y motivo fundacional de la OMSA, demostró al mundo lo que la colaboración internacional puede alcanzar. Nos recuerda que solo a través del esfuerzo colectivo y la confianza fue posible eliminar una enfermedad devastadora”, subrayó la Dra. Soubeyran.
El año 2025 marca un momento clave en materia de desarme, con el 50º aniversario de la Convención sobre las Armas Biológicas y de Toxinas y el 100º aniversario del Protocolo de Ginebra. En este contexto, la conferencia de la OMSA aspira a inspirar colaboraciones fructíferas y compromisos nacionales más firmes en los planes de reducción de las amenazas biológicas.
“En un mundo moldeado por los cambios geopolíticos y los riesgos crecientes impulsados por la tecnología, la sanidad animal es algo que debemos proteger a toda costa”, concluyó la Dra. Soubeyran. “No se trata solo de sanidad animal: también se trata de nuestra seguridad. Al reforzar la reducción de las amenazas biológicas, protegemos comunidades enteras. Protegemos nuestro planeta compartido.”
Nota para los medios de comunicación: Para concertar entrevistas o sesiones informativas, por favor contacte con: Departamento de Comunicación, Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), [email protected]